Hoy se da una conjunción, días anteriores anunciada, de la Luna, Júpiter y Venus. Dos bellezas, la interior y la exterior, vestidas de optimismo. Ese manejo de las emociones armónicamente, poniéndole sentimiento y pasión, y cargadas de un optimismo hacia el futuro, llenan al Ser de una gran fuerza para drenar la oposición Saturno-Urano. Esa conjunción focal de una configuración positiva como salida (trígonos y sextiles) hacen de este fin de año un gran momento para la reflexión interna y prepararnos para ese 2009 incierto pero no muy diferente a épocas anteriores donde siempre se ha salido victorioso.
Que Dios y el Universo nos bendiga a todos
Saludos cordiales,
Pablo Piñero
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